Hubo mucho tiempo para discutir en Expomeloneras sobre sistemas de vigilancia ADS-B y ADS-C, para polemizar sobre las torres virtuales o remotas, para debatir sobre si la tecnología arrincona o no al factor humano en los centros de control del tránsito aéreo o sobre si Eurocontrol o las agencias europea o nacionales de seguridad viven en la realidad o en el mundo extraterrestre, muy lejos de las angustias reales de los profesionales del mundo aeronáutico.
Pero los controladores aéreos de 5 continentes reunidos entre el 5 y el 9 de mayo en la conferencia anual de IFATCA 2014, incluidas sus dos delegaciones más numerosas, de Australia e Irán, respectivamente, tuvieron tiempo también para socializarse, cantar en un karaoke (fue misión imposible conseguir una foto de tan legendario momento, celebrado con la garantía de que las cámaras y los periodistas estaban a kilómetros de distancia) y el gran hito extraprofesional del congreso: el partido de fútbol que jugaron los propios controladores, alineados (he aquí la peculiaridad) en dos curiosos equipos de seguidores del Barça y del Madrid. Con toda la parafernalia: sus bufandas, sus eslóganes y sus camisetas. Por cierto, que ganó el Barça.
